Reseña: Quien pierde paga - Stephen King

Hola visitantes, bienvenidos un día más al Mundo de Naya. 

Hoy es domingo, y además ha sido un domingo complicado para mí, pero prometí subir durante este mes dos reseñas a la semana y es lo que voy a hacer, yo cumplo mis promesas jajajaja 

La reseña de hoy es del último libro de Stephen King, "Quien pierde paga", la segunda parte de una trilogía, aunque os aviso que podéis leer esta entrada sin haber leído ni el primero ni este libro, porque es un caso completamente distinto al que se describe en el primero, así que no sufriréis spoilers del primer libro con mi análisis. 
Tengo que agradecer a la editorial Plaza&Janés que me enviaran un ejemplar de esta maravillosa obra maestra, y por el buen trato y la velocidad a la hora de actuar, da gusto con gente así.

Como siempre, en caso de que aparezcan spoilers (de este volumen) vendrán escritos en gris, y en caso de que haya transcripciones de partes del libro o diálogos del mismo serán escritos en verde, de esta manera podréis decidir si queréis leerlo o no. Os dejo con la reseña y espero que os guste.

FICHA TÉCNICA

Título: Quien pierde paga

Autor: Stephen King

Editorial: Plaza&Janés

Encuadernación: Tapa dura

Edición: 2016

ISBN:  978-84-01-01737-7

Páginas: 441

Precio:  23,90€

SINOPSIS

Morris Bellamy está fuera de sí, no solo porque Rothstein haya dejado de escribir, sino también porque considera que el inconformista Jimmy Gold se ha vendido para dedicarse a la publicidad. Morris decide matar a Rothstein y vacía su caja fuerte para llevarse no solo todo el dinero sino además el verdadero tesoro: los cuadernos de notas de otra novela protagonizada por Jimmy Gold.

Morris lo esconde todo y al día siguiente acaba en la cárcel por otro crimen terrorífico. Décadas más tarde un chico llamado Pete Saubers encuentra el tesoro y ahora son él y su familia a quienes han de salvar Bill Hodges, Holly Gibney y Jerome Robinson del vengativo y trastornado Morris cuando salga de la cárcel tras treinta y cinco años encerrado.

OPINIÓN

La novela que os traigo hoy es la segunda parte de "Mr. Mercedes" aunque como he dicho antes, leer esta reseña sobre este libro no os hará ningún spoiler de la primera parte de la saga, puesto que aunque están relacionados y hay personajes en común, no voy a centrarme en esa unión, sobre todo narrativa, sino más bien en lo especial de este caso, de esta segunda parte, para que podáis haceros a la idea de lo que encontraréis en el libro sin temer destriparos el anterior.

Voy a empezar hablando de dos personajes que marcan toda la historia, son los que mueven casi todos los actos, son dos polos que se verán enfrentados y comparados constantemente, y que en mi opinión son las dos caras de la misma moneda y necesitan por tanto una especial mención:

• Morris Bellamy: Es el personaje culpable del asesinato de Rothstein, escritor de la saga Jimmy Gold, y por tanto se convierte en el malo de la historia. Morris es un personaje con una seria obsesión por las novelas de dicho escritor, es un maniaco, y ha pasado de ser un seguidor acérrimo de una historia a convertir dicha historia en el mantra personal de su vida. La saga de Jimmy Gold solo le ha traído problemas, en el pasado, debido a una discusión con su madre sobre esta obra literaria, acabó bebiendo más de la cuenta y cometiendo un delito que lo llevó al reformatorio de menores; años después le lleva a cometer un asesinato. Sin ninguna duda se muestran dichas novelas como la perdición de este personaje. Su obsesión llega a tal punto que es capaz de quemarse solo por estar cerca de los libros, por intentar tocarlos o mantenerlos a su lado.
• Pete Saubers: El joven que encuentra el tesoro de Morris. Un chico inteligente, responsable, dispuesto a dar cualquier cosa por su familia, incluso de meterse en el peor de los líos si con ello consigue ayudarlos. También resulta ser un gran admirador de Rothstein y su obra maestra, sin embargo su forma de verlo es mucho menos obsesiva, y aunque claramente admira al escritor y los escritos que llevó a cabo, no llega a desvariar de la manera que lo hace Morris.

Como he mencionado con anterioridad, en mi opinión estos personajes son las dos caras de una moneda, nos muestran un paralelismo y como se diferencian uno del otro, hasta el punto en que en un momento determinado de la narración incluso Pete se pregunta si en verdad es tan distinto de Morris.

Algunas evidencias claras que podemos encontrar entre estos dos personajes son: ambos viven en la misma casa, Morris vivió en el pasado y Pete vive actualmente, fueron estudiantes de literatura y grandes admiradores del trabajo de Rothstein, alaban su saga de manera sobrehumana. Su diferenciación principal es en que lado de la linea entre "admiración-obsesión" se encuentra cada uno, y aunque ambos puedan admirar el trabajo del escritor no lo hacen de la misma manera como he señalado ya con anterioridad.

"Para los lectores, tomar conciencia de que son lectores es uno de los descubrimientos más electrizantes de la vida: de que son capaces no solo de leer sino además de enamorarse de la lectura. Perdidamente. Con delirio. El primer libro que ejerce ese efecto nunca se olvida, y cada pággina parece traer una revelación nueva, una que abrasa y exalta."

En cuanto a la estructura narrativa deberíamos dividirla en tres partes. 

En la primera parte los sucesos se dan con una división temporal de años de diferencia, en unos capítulos nos ponemos en el lugar de Morris y conocemos como llevó a cabo el atraco, como cometió el delito por el que fue encarcelado, y sus vivencias hasta que sale de la cárcel; en el otro fragmento temporal podemos vivir los momento que Pete está viviendo una década de años después, como encuentra el tesoro y lo que hace con él. Durante toda esta parte ambos fragmentos temporales se entremezclan, intercalando capítulos de uno y otro.

En la segunda parte de la narración la historia ya no varía su tiempo en años, quizás en minutos puesto que en ocasiones nos cuenta el mismo suceso desde la compañía de distintos personajes. Estos capítulos son mucho más cortos lo que le da mayor velocidad a la trama.

La última parte es el final de la historia, tres capítulos al acabar en los que nos cuentan como han acabado todos los personajes y que les deparará el futuro.

"Leer los cuadernos allí, cerca de las mismas montañas que debía de contemplar Rothstein mientras escribía... eso poseía cierta redondez novelística ¿o no? Si, y eso era lo extraordinario de las novelas: esa redondez. La manera en que al final todo se reequilibra" 

Sobre la temática, Stephen nos muestra una realidad dura, seria y muy actual, un mundo en el que se pueden observar los problemas económicos, el paro, los recortes... y las consecuencias que esto acarrea en las personas que lo sufren; por otro lado, la intensificación del dolor de los personajes a través de sus vivencias, como las violaciones que Morris sufre durante su periodo en la cárcel, nos hacen apiadarnos de los personajes, sentirles humanos, notar su sufrimiento, sufrirlo por ellos, y crear una mayor tensión emocional en los lectores.

"- ¿No eres un ángel?

- Lo intento"

Sobre la forma de narrar, el autor nos presenta una historia contada con maestría, usando sus dotes para crear suspense e intriga nos lleva a devorar las páginas de esta novela con nerviosismo, con la inquietud de no saber como acabará y temiéndonos un final no deseado por ninguno. Por otra parte, la velocidad asciende conforme avanza la trama, haciendo que nos sintamos más agobiados, denotando una sensación de intranquilidad, y consiguiendo que conduzcamos a gran velocidad hacia un final con el que tememos encontrarnos. Destacar también que los saltos temporales y el revivir de varias escenas desde distintos puntos de vista hacen que nosotros ya conozcamos ciertos detalles que los personajes no, que vayamos un paso por delante de ellos, pero esto no nos quitará para nada el desasosiego o el miedo que nos cala los huesos al leer cada capítulo de esta historia, sino que por el contrario, nos hará plantearnos que sucederá cuando el personaje descubra aquello que nosotros ya conocemos.

"Confío en tu bondad natural, que, me gustaría creer, está ahí dentro de ti, en algún sitio, por minúscula que sea"

¿A quien puede gustarle esta historia? A cualquier lector al que le guste descubrir secretos, que disfrute con las historias de intriga, con aquellas que nos atan y nos hacen sentir la misma angustia que sufren sus personajes impidiéndonos dejar de leer hasta que hemos conocido su sino. Stephen King es sin duda un maestro del misterio, y por ello, utiliza sus grandes dotes para crear este libro, fuera de su estilo clásico de terror, pero que puede, de igual manera, congelarnos por dentro.

Esta obra ha conseguido mantenerme pegada a sus páginas durante interminables momentos y ha conseguido dejarme un sabor de boca estupendo, y por dicha razón, le voy a dar un 10.

Hasta aquí la reseña de hoy, espero que os haya gustado. 

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Un beso grande, y nos vemos pronto en el Mundo de Naya.